En la lucha contra el hambre, es evidente que las entregas regulares de alimentos no son suficientes para garantizar la seguridad alimentaria de muchas personas. Es necesario que los programas de nutrición estatales sean el centro de atención y se invierta más en ellos.
Creo en el trabajo que hacemos en la despensa de alimentos y me enorgullece. Sin embargo, si los legisladores promulgaran un salario mínimo digno o invirtieran más en programas como SNAP, las personas no dependerían de despensas como la mía. Las despensas son solo una pieza fundamental en el rompecabezas contra el hambre, pero deberían ser complemento de programas gubernamentales con la infraestructura y financiamiento adecuados para llevar a cabo la tarea.
Yo crecí usando estampillas de alimentos, conocido como el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP). Mi madre trabajaba duro, pero su sueldo era demasiado bajo para cubrir nuestras necesidades básicas. A veces, nos sentíamos avergonzados sacando las estampillas en el registro del supermercado, temiendo que los niños hablaran de mí en la escuela. Pero esa ayuda era una bendición, nos ayudaba a no pasar hambre. Sin embargo, las estampillas de alimentos no estaban diseñadas para durar todo el mes. La mayoría de los meses teníamos que viajar largas distancias, a menudo fuera de nuestro condado, para encontrar despensas de alimentos y poder sobrevivir.
SNAP es el programa antihambre más efectivo del país, alimentando a casi una cuarta parte de todos los niños estadounidenses. El programa reduce el hambre en un 30%, mejora los resultados educativos, de salud y económicos a largo plazo para los niños, y ayuda a abordar las disparidades raciales sistémicas en la pobreza.
SNAP es la primera línea de defensa en una economía en crisis. De hecho, la inseguridad alimentaria disminuyó a un mínimo histórico del 10.2% en 2021, en medio de la pandemia, gracias al aumento de los beneficios de SNAP durante ese período. Sin embargo, ahora que esos beneficios han expirado, casi un 13% de nosotros experimenta inseguridad alimentaria.
Para muchos estadounidenses, los salarios son simplemente demasiado bajos. Para cubrir las necesidades básicas en Carolina del Sur, donde vivo, dos adultos con dos hijos deben ganar más de $21 por hora. Pero el salario mínimo en nuestro estado es de solo $7.25. Una persona tendría que trabajar 106 horas a la semana con ese salario para poder pagar un modesto apartamento de dos habitaciones aquí. De hecho, el salario mínimo no es suficiente para cubrir el alquiler promedio de un apartamento de dos habitaciones en ningún lugar del país.
Más de 44 millones de estadounidenses dependen de SNAP para combatir el hambre. Sin embargo, algunos miembros del Congreso están proponiendo recortar el programa en una asombrosa cifra de $30 mil millones en la próxima década. Solo en Carolina del Sur, uno de los 10 estados con mayor inseguridad alimentaria, esto significaría recortes por valor de $400 millones. Sería devastador para familias como la mía.
Soy una madre soltera con tres hijos. A los tres años, a uno de mis hijos le diagnosticaron autismo y no encontré un cuidado infantil asequible que pudiera satisfacer sus necesidades. Cada semana tenía que dejar el trabajo de repente para ayudarlo o llevarlo a casa. No podía mantener un empleo. Necesitaba ayuda durante ese momento difícil y SNAP la proporcionó.
Ahora dirijo una despensa de alimentos llamada Food for All, donde he visto que no estoy sola. Escucho las historias de las personas que vienen aquí y comparto la mía para aliviar su vergüenza. Respiro aliviada con ellos cuando me dicen: “Ahora puedo pagar mi medicación”, “Ahora puedo pagar el alquiler” o “Ahora no tengo que elegir entre alimentar a mi hijo y comprarle zapatos nuevos”.
Pero otras veces, tengo que presenciar cómo aquellos que han esperado en largas filas durante una hora son rechazados porque se ha agotado la comida. No puedo conseguir suficientes donaciones de alimentos para satisfacer la enorme necesidad.
Sin embargo, no me rindo. Ninguno de nosotros puede hacerlo. Por eso sigo luchando por un financiamiento sólido, y en contra de los recortes propuestos, de SNAP. Las personas no deberían depender de despensas de alimentos para alimentarse a sí mismas y a sus familias.
Sabemos lo que funciona. Vimos cómo disminuyó el hambre durante la pandemia cuando se había pronosticado que aumentaría, y eso fue porque invertimos en el bienestar de las familias. Debemos hacerlo nuevamente.
Carla Ventura es una madre, fundadora de la organización sin fines de lucro Food for All, y una experta en pobreza con RESULTS en Columbia, Carolina del Sur.
Sección de preguntas frecuentes (FAQ):
1. ¿Qué es SNAP?
SNAP, conocido como el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria, es un programa de ayuda alimentaria en Estados Unidos.
2. ¿Cuál es la importancia de SNAP?
SNAP es el programa antihambre más efectivo del país. Alimenta a casi una cuarta parte de todos los niños estadounidenses, reduce el hambre en un 30% y mejora los resultados educativos, de salud y económicos a largo plazo para los niños.
3. ¿Cuántos estadounidenses dependen de SNAP?
Más de 44 millones de estadounidenses dependen de SNAP para combatir el hambre.
4. ¿Cómo ha afectado la pandemia a la inseguridad alimentaria?
Durante la pandemia, la inseguridad alimentaria disminuyó a un mínimo histórico del 10.2% gracias al aumento de los beneficios de SNAP. Sin embargo, ahora que esos beneficios han expirado, casi un 13% de la población experimenta inseguridad alimentaria.
5. ¿Cuáles son las propuestas de recorte a SNAP?
Algunos miembros del Congreso están proponiendo recortar el programa en una asombrosa cifra de $30 mil millones en la próxima década.
6. ¿Cuál es la importancia de la financiación de SNAP?
La financiación sólida de SNAP es crucial para garantizar que las personas no dependan de despensas de alimentos para alimentarse a sí mismas y a sus familias.
7. ¿Cuál es el salario mínimo en Carolina del Sur?
El salario mínimo en Carolina del Sur es de solo $7.25, lo cual es insuficiente para cubrir las necesidades básicas.
8. ¿Cómo afectaría a Carolina del Sur los recortes propuestos a SNAP?
En Carolina del Sur, uno de los 10 estados con mayor inseguridad alimentaria, los recortes propuestos significarían recortes por valor de $400 millones.
9. ¿Cuál es el objetivo de la organización sin fines de lucro Food for All?
Food for All es una despensa de alimentos que busca satisfacer la enorme necesidad de alimentos para aquellos que lo necesitan.
10. ¿Quién es Carla Ventura?
Carla Ventura es una madre, fundadora de la organización sin fines de lucro Food for All, y una experta en pobreza con RESULTS en Columbia, Carolina del Sur.
Referencias relacionadas:
– RESULTS
– Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP)